Como una novela de la siesta ha levantado capítulos el cierre de los cines en Formosa desde la pandemia: primero fue la presidente del PRO, Patricia Bullrich, que lo relaciono a Gildo Insfrán con la dictadura y, ahora, salió al cruce el funcionario autor del ataque al “villerito europeizado” a Carlos Tevez.
El fin de semana la dirigente nacional reclamó por la reapertura de los cines Avenida, de propiedad del supermercadista Ricardo Cáceres, y el Cine-Teatro Italia que están cerrados desde la pandemia. Y aseguró que forman parte “de la dictadura de Gildo Insfrán”.
El subsecretario de Cultura formoseño, Jorge Santander, dijo que la líder del pro nacional “sin conocimiento alguno de la realidad, carga sobre el Gobierno de la Provincia catalogando de “dictadura”.
Santander, en una carta firmada en los diarios, trato a Bullrich de “calumniadora de lo popular” y “con una mente tenebrosa juzga que las salas de cine se mantienen cerradas para cercenar la libertad de los formoseños y trata de devaluar una reapertura”.
“No hay caprichos ni maldad”, dijo el funcionario formoseño y explicó que desde agosto “intentamos colocar los acondicionadores de aire, que pesan un par de toneladas y que solo se podían incorporar al edificio por un playón vecino, vedado a nuestros intentos por los inquilinos, fuertes opositores al Gobierno, y recién al cumplir ellos su contrato de locación, el propietario de inmueble permitió la acción a principios de enero, cinco meses después”.
Santander viralizó su existencia al acusar al jugador e ídolo de Boca, Carlos Tevez, de “villerito europeizado” después de las declaraciones contando la pobreza en Formosa. Ahora le colgó otro cartelito a Bullrich: “antipueblo”, disparó.